Crear una fragancia: una sensación de asombro

Crear una fragancia es un proceso complejo, de varios niveles, que fusiona arte y ciencia. Es necesario contar con los materiales, las personas, las ideas y los socios adecuados.

Los miembros de la IFRA producen ingredientes para fragancias y crean mezclas de fragancias, generalmente a partir de lo que piden las marcas y empresas de bienes de consumo.

Estas mezclas se añaden a productos de consumo elaborados, como son los productos de cuidado personal, cosméticos, productos de limpieza para el hogar o fragancias finas.


En esta página

Proveedores de satisfacción y solucionadores de problemas

Las fragancias están diseñadas con cuidado, pasión e ingenio, dan placer a miles de millones de personas de todo el mundo que las usan y disfrutan todos los días, desde un champú de olor fresco o un perfume elegante hasta una vela perfumada a unas sábanas recién lavadas.

Más allá del arte, las fragancias también ‘solucionan problemas’ porque las propiedades complejas de las fragancias permiten a las personas controlar o eliminar los malos olores que afectan a la vida cotidiana de millones de personas.

Controlar estos olores utilizando fragancias integradas en productos para el hogar y el cuidado personal mejora la calidad física de la vida de las personas.

De la planta al perfume

Antes de iniciar la fabricación es necesario reunir los ingredientes iniciales, ya sean naturales o sintéticos.

En el caso de los ingredientes naturales – como flores, hierbas, especias, frutas, madera, raíces, resinas, hojas y gomas – el proceso puede implicar la recolección de materiales naturales de todas las partes del mundo.

A menudo, estos ingredientes se recogen a mano y se destilan o se extraen en el campo para preservar su fragancia. Los aceites se extraen de las plantas mediante diversos métodos, como la destilación con vapor, la extracción con disolventes y la expresión.

Los materiales sintéticos, como el alcohol y los productos petroquímicos, también se utilizan para "recrear" los aromas naturales, lo que abarata el uso y requiere menos recursos.

Con estos ingredientes, los perfumistas pueden combinar fórmulas que coincidan con lo que piden sus clientes.


Conocer a las 'narices'

La industria de las fragancias emplea artistas e innovadores con habilidades infrecuentes. Sólo hay unos mil perfumistas plenamente cualificados en el mundo.

Estos perfumistas, conocidos como 'narices', se forman durante más de siete años y tienen habilidades únicas para identificar y combinar los ingredientes.

Al igual que con la música, las fragancias son combinaciones de 'notas', con posibilidades casi infinitas; al igual que con los compositores, se necesita un talento poco común para combinar estas notas de manera que conecte poderosamente con los sentidos.

Las notas de salida salen primero: a menudo son olores ácidos o cítricos que son fáciles de oler y más fugaces.

Las notas de corazón, a menudo flores aromáticas, salen más tarde: aportan cuerpo.

Las notas de fondo (a menudo fragancias amaderada) duran más: proporcionan una fragancia duradera.

La amplia gama de fragancias a menudo se muestra en una ‘ruleta de fragancias’.

 

Ver la Ruleta de fragancias del mundo, de Michael Edwards [enlace externo, en inglés] »

Combinar todo

El proceso de creación de las fragancias se basa en un proceso único de asociación entre los fabricantes de fragancias – representados globalmente por la IFRA y su red de asociaciones nacionales – y los propietarios de marcas de bienes de consumo, lujo y minoristas.

Todos ellos combinan juntos sus ideas sobre mercados y marcas, su conocimiento de la ciencia y la funcionalidad de los ingredientes, y su creatividad e innovación para dar con la fragancia adecuada.

El proceso de creación se lleva a cabo de acuerdo con los Estándares de la IFRA para garantizar que la nueva fragancia se pueda utilizar y disfrutar de forma segura.

La industria de las fragancias no se detiene: en un mundo de automatización y cambio, la industria complementa cada día más los conocimientos y las habilidades exclusivas de las personas con la inteligencia artificial.