La industria de fragancias se toma en serio la responsabilidad de cuidar a las personas y el medio ambiente.
A través de nuestro trabajo, queremos garantizar que la confianza y la seguridad figuren entre las emociones positivas extraídas de la fragancia, entre ellas la alegría, el placer, la limpieza y la atracción.
Establecemos y cumplimos exigentes normas de calidad en nuestro trabajo, empleando medidas rigurosas de evaluación de la seguridad y de gestión, con supervisión independiente.
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Ayudar a que disfrute de la fragancia con confianza
El código de buenas prácticas de la IFRA y los Estándares de la IFRA son nuestras principales herramientas para garantizar el uso y el disfrute seguros de la fragancia.
El código y los Estándares son obligatorios para todos los miembros, incluidos los de las asociaciones nacionales, que representan alrededor del 80% de la industria de las fragancias por volumen de producción.
Los Estándares se basan en evaluaciones científicas de última generación llevadas a cabo por el Instituto de Investigación para Materiales de Fragancias y supervisadas por un grupo de expertos independiente.
Por tanto, IFRA establece normas – limitaciones o incluso prohibiciones de ciertos ingredientes – para ayudar a garantizar que las personas puedan disfrutar de productos perfumados con confianza.
Nuestro compromiso con la sostenibilidad
También nos tomamos en serio la responsabilidad de cuidar el medio ambiente común y ser sostenibles.
Esto no se limita a ‘ser ecológicos’.
Se trata de adoptar una estrategia integral de la sostenibilidad en todos los aspectos y a lo largo de la cadena de valor de las fragancias, y observar cómo interactuamos con proveedores, clientes, empleados, comunidades y partes interesadas.
Esta estrategia se utiliza para la carta de sostenibilidad IFRA-IOFI, una iniciativa conjunta con nuestros compañeros de la industria de los sabores.
Utilizamos una amplia gama de materias primas de origen natural y sintético para ofrecer productos de alta calidad que respeten el medio ambiente y las comunidades de todo el mundo.
No se trata de que ‘lo natural sea bueno y lo sintético malo’. Adoptamos un enfoque ‘neutro en cuanto al origen’ tanto para la protección del medio ambiente como para las evaluaciones de seguridad.
